José Pablo Moncayo García | De todas las melodías del México actual, el “Huapango de Moncayo” es la que más representa a los mexicanos, se considera como el segundo himno nacional mexicano.José Pablo Moncayo García (Guadalajara, Jalisco, 29 de junio de 1912 — Ciudad de México, 16 de junio de 1958), fue un compositor mexicano.Ingresó al Conservatorio Nacional de Música en 1929, pero por la crisis en esta época se ve obligado a tocar como pianista en cafés y estaciones de radio para contribuir a la economía familiar y para poder pagar sus estudios, hasta que ingresa como percusionista a la Orquesta Sinfónica Nacional dirigida por Carlos Chávez. El Huapango de Moncayo esta formado por tres sones veracruzanos: Siqui sirí y Balajú y el Gavilancito. |
Se dice que José Pablo Moncayo tenía que hacer una composición musical, pero no tenía idea de como hacerla, viajó por diferentes partes de México para escuchar diferentes ritmos… al finalizar su viaje creo un popurrí, el cual llamó Huapango en homenaje geográfico del lugar en donde recogió el material. Su facilidad para componer y desenvolver su capacidad creativa en géneros musicales tan dispares como Ballets, música de cámara, ópera y piezas sinfónicas hicieron posible esta magnífica obra.
Moncayo es uno de los músicos más sobresalientes del México posrevolucionario y uno de los compositores más conocidos en el ámbito internacional. Moncayo se dedico también a la docencia, por lo que impartió cátedras de armonía, composición, dirección de coros y dirección de orquesta en el Conservatorio Nacional. Dirigió la Orquesta Sinfónica Nacional, en la que permaneció desde 1950 hasta 1954.
Entre sus principales obras destacan “Amatzinac”, 1938; “Penatori” (obra coral para niños); “Canciones de mar” (obra coral para adultos), “Huapango”, 1941; “Sonata para viola”, “Fantasía intocable”, “Romanza de las flores de calabaza”, “Cuento de la potranca”, “Homenaje a Cervantes” y su ópera “La mulata de Córdoba”.
A excepción de “Huapango” lamentablemente estas obras, permanecen en el olvido y son poco tocadas. La generación a la que perteneció Moncayo, asumió el papel respecto a la proyección de la música popular, dándole un empuje profesional.
José Pablo Moncayo murió en la ciudad de México el 16 de Junio de 1958, fue sepultado en el Panteón Español.