La desobediencia de marte, una obra de admiración y confrontación

Juan Villoro es el autor de La Desobediencia de Marte, una obra que confronta en el escenario a dos personajes con una visión totalmente diferente del universo, por un lado Johannes Kepler y por Tycho Brahe, unidos por la genialidad y la admiración y al mismo tiempo con sentimientos de repudio el uno del otro. Dirigida por Antonio Castro, Víctor Trujillo y Mauricio Isaac interpretarán a estos científicos que por momentos quedarán detrás para confrontar las dos visiones sobre el mundo de la actuación, la juventud contra la experiencia, la admiración y la repulsión de dos entes en diálogos que pondrán en la mesa diversas diferencias generacionales.

Para Villoro el trabajo de Trujillo y Mauricio Isaac en los escenarios lo convenció de ser perfectos para interpretar este texto que requiere de sagacidad para darle sentido a las palabras filosas del guión que confronta la inteligencia de dos mentes brillantes tratando de descubrir los misterios del universo pero que al mismo tiempo batallan con sus propias fobias y filias.
Este encuentro entre Johannes Kepler y Tycho Brahe sentarán las bases del trabajo científico tan importante como las teorías de Newton. Este pasaje de la historia inspiró a Villoro para crear un texto de confrontación, descubrimiento y tolerancia entre mundos y personalidades diferentes en un proceso que requirió de varios años. Todo este texto y la interpretación de dos grandes actores se desarrollará en un escenario que agrega piezas de Damián Ortega quien dará una visión contemporánea a una historia que se desarrolla en la época renacentista.

¿Cómo llevar a los jóvenes al teatro?

Es un momento de apogeo de las plataformas digitales, sobre todo entre los jóvenes que pareciera están alejándose de opciones de entretenimiento como el teatro. La Ciudad de México es una de las que ofrece una gran opción de producción teatral, sin embargo, es complicado hacerlo por una especie de lejanía entre los escenarios y una generación llena de tecnología.

“El teatro además de tener el placer de ser en vivo, tiene el placer jústamente de emocionar y de estar en contacto con dos personas que están haciendo lo mejor técnica y emocionalmente posible” Fue lo que comentó Mauricio Isaac al preguntarle qué le diría a los jóvenes que no ven al teatro como opción de entretenimiento. Para Juan Villoro “El teatro es un acto de presencia y yo creo que hoy en día nosotros necesitamos de lugares en los que estemos juntos y el teatro tiene una dimensión casi de rito en este sentido. En una época en la que nos representamos a nosotros mismos en las pantallas, que tenemos un alias o un password para entrar a un sitio o un cajero automático me parece decisivo para preservar nuestra humanidad estar juntos, reunirnos, y por eso yo creo que el teatro es una reserva de humanidad muy importante. Nada sustituye ese momento de catarsis donde se conectan la emoción del actor con el espectador”.